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Diseñador, programador, content manager y escritor.

La verdadera felicidad está construida por un perpetuo estado de iniciación, de entusiasmo constante. - Julio Ramón Ribeyro

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Con mi familia tenemos una tradición en nuestros cumpleaños, empezamos a celebrarlo un día antes y terminamos un día después, es decir, los celebramos tres días, porque llegamos a la conclusión de que un día pasa muy rápido y de esa manera todos disfrutamos más nuestro día especial.

Podemos elegir nuestros regalos y nuestra comida favorita, tomar un descanso, entre otros privilegios que solo el día de tu cumpleaños se te puede otorgar, al cuarto día todo vuelve a la normalidad. 

Sería espectacular que todos los días fueran nuestros cumpleaños y así poder pedir con confianza y hasta con derecho algunas cosas.

Encontré un versículo interesante en la versión en inglés de El Mensaje, en el Salmo 2:7-9 dice lo siguiente:


"Let me tell you what God said next.
He said, “You’re my son,
And today is your birthday.
What do you want? Name it:
Nations as a present? continents as a prize?
You can command them all to dance for you,
Or throw them out with tomorrow’s trash”.


En español diría lo siguiente:

"Déjame decirte lo que Dios dijo a continuación.
Él dijo: "Tú eres mi hijo,
Y hoy es tu cumpleaños.
¿Qué deseas? Nómbralo:
¿Naciones como un regalo? ¿Continentes como premio?
Puedes ordenarles a todos que bailen por ti,
O tirarlos con la basura de mañana".

¡Interesante!, diría, espectacular! ¡Dios nos dice que hoy es nuestro cumpleaños y nos pide nombrar las cosas que deseamos, solo en nuestro cumpleaños tenemos un derecho especial de pedir algo especial,tu lo sabes y yo lo sé, y Dios te dice que hoy es tu cumpleaños!

Jesús también lo dijo en Juan 15:7: "Si permanecéis en mí, y mis palabras permanecen en vosotros, pedid todo lo que queréis, y os será hecho".

Es una promesa para hoy, Dios nos da la posibilidad y el privilegio de acercarnos confiadamente a Él (Hebreos 4:16) a cualquier hora y pedirle lo que quisiéramos, porque su trato hacia nosotros es como si todos los días fuera un día especial en el cual tengamos la oportunidad de pedirle algo, ¡para Dios todos los días es tu cumpleaños!

"Y todo lo que pidiereis al Padre en mi nombre, lo haré, para que el Padre sea glorificado en el Hijo". - Juan 14:13










 

He aprendido a luchar

y a esperar por mis victorias

en medio de quienes creen haberla ya alcanzado.




¿No es acaso la victoria

una recompensa ambigua

que tarde o temprano llega a quien la busca?




La poesía de mi vida

nace en las prosas sin patria

de las palabras escritas por un mudo.




Mi silencio está con quienes gritan su libertad de

expresión

y mis gritos en la agonía

de quienes esperan en silencio

su libertad de expresarse.




He escrito sin cansancio

y he vivido mis más grandes aventuras,

cortas alegrías,

grandes fracasos,

he muerto y he nacido,

he llorado y he reído,

he sido tu y he sido yo

en las líneas de unas hojas

de papel en blanco.




Encontré refugio en mi máquina de escribir

en una copa de vino

y en un cigarrillo encendido,

cerca de algun acantilado,

me escape del ruido de lo común

y abrace lo único, diferente

y extraordinario.




Partí silencioso,

mudo en la eternidad

del recuerdo atros

e inalterable de quienes me leen,

y me traen devuelta a la vida,

para volver reencarnado

en un niño de la azotea,

en un joven sufriendo un desamor,

en un hincha furioso limeño

o en un adulto tentado por el fracaso.




Si gusto o no, poco importa,

escribo porque eso para mí

es un placer,

un privilegio

y una sutil esperanza

de renacer en cada nuevo lector.

 

 

Por: Willy Lazo Álvarez


El cuento es un género literario que siempre me ha cautivado. Desde niño, para ser exacto. Nunca olvidaré la impresión que me causó la lectura de Garduño, de Anatole France, cuando tenía once o doce años: al llegar al final sentí una especie de sofocación o de vértigo por lo inesperado del desenlace. Más tarde otros cuentos me sedujeron, pero por razones diferentes: Los ojos de Judas de Valdelomar, por su tono nostálgico y melancólico; La botija de Pirandello, por lo divertido de la situación; La carta robada de Poe, por lo ingenioso de su intriga; Bola de sebo de Maupassant, por la sublevante crueldad de la historia; Matías de Eça de Queirós, por su delicada ironía, o Una historia simple de Flaubert, por la concisión de su estilo. Y más tarde aún, al leer cuentos de Kafka, Joyce, James, Hemingway y Borges, por citar algunos autores, descubrí nuevas probabilidades y goces en el relato breve; la lógica del absurdo, la habilidad técnica, el arte de lo no dicho, la eficacia del diálogo, y la sapiencia y fantasía puestas al servicio de paradojas y parábolas intelectuales.


En tanto que cuentista, yo soy hechura de estas lecturas y de muchas otras que sería largo citar. Uno está nutrido de los autores que ama, de los que algo o mucho toma y aprende, pero sobre todo está nutrido de su propia experiencia. Y la mía, por tiempo, lugar y accidentes, es diferente a la de los autores que admiro, de modo que mal podría escribir como ellos. Mis cuentos, al menos así lo creo, son el espejo de mi propia vida, la de un escritor limeño de la segunda mitad de nuestro siglo, educado en un ambiente de la burguesía ilustrada, que vivió muchos años en Europa, que desempeñó más por necesidad que por gusto diversos trabajos, que alternó periodos de disipación con periodos de reclusión y que retornó a su país cargado de recuerdos y vivencias, pero con muy pocas certezas y la sensación de haber perdido demasiado tiempo, salvo quizás el empleado en escribir algunos libros, particularmente de cuentos.


Cuentos, espejo de mi vida, pero también reflejo del mundo que me tocó vivir, en especial el de mi infancia y juventud, que intenté captar y representar en lo que a mi juicio, y de acuerdo a mi propia sensibilidad, lo merecía: oscuros habitantes limeños y sus ilusiones frustradas, escenas de la vida familiar, Miraflores[2], el mar y los arenales, combates perdidos, militares, borrachines, escritores, hacendados, matones y maleantes, locos, putas, profesores, burócratas, Tarma y Huamanga, pero también Europa y mis pensiones y viajes y algunas historias salidas solamente de mi fantasía, a eso se reducen mis cuentos, al menos por sus temas o personajes. Que ellos —mis cuentos— tan variados y dispares, fragmentos de mi vida y del mundo como lo vi, puedan sumados adquirir cierta unidad y proponer una visión orgánica, coherente, personal de la realidad, es algo que no podría afirmar. Y que tampoco me preocupa demasiado. Así como tampoco me preocupa que mis cuentos no reflejen las mutaciones sufridas por el Perú en los últimos veinte años. Escribir sobre lo actual, sobre lo inmediato, es importante pero no indispensable. Para ello hay además entre nosotros muchos jóvenes y excelentes cuentistas. Aunque es bueno recordarles, parafraseando a Borges, que la actualidad es a menudo anacrónica.


Para concluir este breve preámbulo diré que me hubiera gustado aprovechar la ocasión para desarrollar mi concepción del cuento o si se quiere mi poética del cuento, a la luz de mis cuarenta o más años de experiencia en este género. Pero me pareció ocioso o redundante, pues dicha poética se encuentra formulada implícitamente en mis relatos, al menos para el lector atento. Me limitaré en consecuencia a enunciar al azar algunos preceptos:


1.— El cuento debe contar una historia. No hay cuento sin historia. El cuento se ha hecho para que el lector a su vez pueda contarlo.


2.— La historia del cuento puede ser real o inventada. Si es real debe parecer inventada y si es inventada real.


3.— El cuento debe ser de preferencia breve, de modo que pueda leerse de un tirón.


4.— La historia contada por el cuento debe entretener, conmover, intrigar o sorprender, si todo ello junto mejor. Si no logra ninguno de estos efectos no existe como cuento.


5.— El estilo del cuento debe ser directo, sencillo, sin ornamentos ni digresiones. Dejemos eso para la poesía o la novela.


6.— El cuento sólo debe mostrar, no enseñar. De otro modo sería una moraleja.


7.— El cuento admite todas las técnicas: diálogo, monólogo, narración pura y simple, epístola, informe, collage de textos ajenos, etc., siempre y cuando la historia no se diluya y pueda el lector reducirla a su expresión oral.


8.— El cuento debe partir de situaciones en las que el o los personajes viven un conflicto que los obliga a tomar una decisión que pone en juego su destino.


9.— En el cuento no deben haber tiempos muertos ni sobrar nada. Cada palabra es absolutamente imprescindible.


10.— El cuento debe conducir necesaria, inexorablemente a un solo desenlace, por sorpresivo que sea. Si el lector no acepta el desenlace es que el cuento ha fallado.


La observación de este decálogo, como es de suponer, no garantiza la escritura de un buen cuento. Lo más aconsejable es transgredirlo regularmente, como yo mismo lo he hecho. O aún algo mejor: inventar un nuevo decálogo.

 

Tuve la suerte de encontrarme con este testimonio acerca del gran Julio Ramón Ribeyro.

 

CONMEMORACIÓN

- Cesar Reyes V.


Pasé horas ante su tumba el día que fue sepultado.
Comencé a leerlo a los doce años en Huacho.
Luego, donde fuera que estuviera, lo seguí leyendo.
Cierta vez -al final de una conferencia- logré su firma en uno de sus libros.
Nunca dejé de leerlo. 


Durante dos años -en cuarto y quinto de secundaria- día por día, leí y releí a Julio Ramón Ribeyro.
Todas las noches, antes de dormir, abría uno de los tomos de "La palabra del mudo".
Tres tomos de pasta brillante y tersas hojas eran mi tesoro cotidiano.
Mi talismán secreto oculto bajo la almohada.


En 1984, al final de una apoteósica presentación, logré que el escritor estampara raudo su firma en un ejemplar de "Prosas apátridas" (que luego regalé a mi amigo/compadre Walter Salazar Pérez).
Cuando murió fui a su funeral, pero llegué tarde al entierro.
"Yo sé que quieres ir. Vamos".
Dicho y hecho, en menos de una hora, gracias a Juliana (una abogada del Congreso cuya promoción llevó el nombre del escritor) llegamos al cementerio Jardines de la Paz.
Contemplando el vasto horizonte de la ciudad, junto a su tumba cubierta de flores, pasaron las horas.
Así me despedí del escritor de mis más entrañables lecturas y relecturas.


Cuarentena y dos años después de mis fervorosas lecturas adolescentes, la mañana del 10.1.2021 comparezco -de súbito- ante un volumen que captura mi atención.
Se trata del libro que en toda una vida escribió su autor. Su título no puede ser más persuasivo y convincente: “La tentación del fracaso”. (Me encuentro -previo a mi retorno a Huacho- en el centro de Lima. Tengo previsto regalarme un libro y decido buscar “Soldados de Salamina” de Javier Cercas.
Los muchachos del centro ferial Amazonas ignoran al autor español y su obra más celebrada). Me parece desolador regresar a una ciudad donde solo existe una sola librería y escasos textos originales/legales.


Mientras deambulo entre libros que miro igual que a la gente que pasa por la calle, de pronto, semejante a un rostro amado, aparece el libro del autor de mi feliz juventud.
Parece mentira (tengo la edad para ser nieto de mí mismo) pero la emoción y el entusiasmo que experimento vuelve inalterable, implacable, sin edad.


 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
 
Décadas de pósters de películas históricas pasan a ser online al ser digitalizadas para que puedas descargarlas. Archivos que pueden pesar hasta más de 2MB, lo que muestra que la calidad es exquisita.

En total son más de 10.000 pósters que recogen distintas décadas de la industria cinematográfica. Podemos hablar de pósters de los años 30 hasta otros tantos que estuvieron en cartelera allá por los años 70. Una gran oportunidad para cinéfilos que quieran tener ese trocito de historia en un archivo a descargar; el resto dependerá de cada uno.

Todos esos pósters pueden ser descargados en tres tamaños distintos a gusto del «consumidor». Podemos encontrar diseños simples como West Side Story, uno de los mejores musicales de la historia del cine, u otro tipo de pósters más complejos como Africa Texas Style!.

Esta colección de pósters de películas es parte de un ambicioso proyecto de digitalización. Cada uno de los 10.000 pósters son transferidos en un primer momento al estudio de fotografía, para que los metadatos sean recogidos desde el póster para crear el archivo de la base de datos.

Una vez que el póster esté correctamente alineado con la cámara, la altura de la misma ha de ser ajustada para encajar con el tamaño del póster, y así una foto de alta definición sea tomada. El fotógrafo ha de revisar la imagen para comprobar que es fiel a la original con el propósito de preservarla. Finalmente el póster se lleva de nuevo a su carpeta para comenzar con otro.

Hasta el momento han sido más de 4.000 pósters los que han pasado a verse online después de 1 año de trabajo de Lauren Walker y su equipo en el estudio de fotografía.

Haciendo que esos pósters pasen a ser vistos y descargados online permite un mayor acceso para preservarlos en el tiempo. El resto de la colección Movie Poster Collection se espera que sea digitalizada para finales de 2018 y principios de 2019.
 
Puedes elegir y descargar tu poster desde aqui: COLECCIÓN OPCIÓN 1
O desde aqui: COLECCIÓN OPCIÓN 2
 

En todo esos meses de la pandemia yo cuidaba de no eliminar la información de un grupo de WhatsApp donde enviaban varios remedios naturales para usar cuando una persona se contagiara, liberaba espacio en mi teléfono borrando todo menos eso.

Es gracioso, en una de esas veces que borraba mis mensajes y me saltaba esos escuche dentro de mi: "Si no borras eso ahora, lo tendrás que usar". Adivinen que! lo hice, si, lo borre! Borre toda la información de remedios caseros que estaba cuidando como oro en ese grupo.

No han sentido muchas veces que tienen fe, pero tienen un plan B por si la fe no funciona? creo que en el momento que planteamos un plan B la fe se acaba.

Eso me paso a mi, a diario orábamos con mi familia para que Dios nos guarde del virus y el lo hizo hasta ahora, pero guardaba la información de los remedios "POR SI ACASO"

Eso no es fe, no es creerle a Dios, no estoy diciendo que no uses medicinas si llegas a contagiarte, es solo un ejemplo. Si le vas a creer a Dios en algo que sea a un 100%.

Dios no abrió la mitad del mar rojo para que pase Israel, la piedra de David no solo hizo tambalear al gigante, lo tumbo, los muros de Jerico no cayeron a la mitad, el paralitico no se fue cojeando de la presencia de Jesús, ni el ciego se fue cegatón, el vino que antes era agua era el mejor vino, y podría seguir. Si creemos que Dios hará algo, el lo hará completo, no necesitamos un plan B.

Si dudas no es fe, vamos a creerle al 100% y El hará!

 

Pocos son los que con tanta sencillez, naturalidad y sinceridad pueden explicar en facilidad el proceso creativo de un cuento y de una novela, un fragmento del prologo del libro 12 CUENTOS PEREGRINOS del gran Gabriel García Marquez salta como una mini clase maestra acerca de la composición narrativa. Fragmento que te comparto a continuación:

 

"... Ahora  sé 
por  qué:  el  esfuerzo  de  escribir  un  cuento  corto  es  tan  intenso  como  empezar  una 
novela. Pues en el primer párrafo de una novela hay que definir todo: estructura, tono,
estilo,  ritmo,  longitud,  y  a  veces  hasta  el  carácter  de  algún  personaje.  Lo  demás  es  el 
placer de escribir, el más íntimo y solitario que pueda imaginarse, y si uno no se queda
corrigiendo  el  libro  por  el  resto  de  la  vida  es  porque  el  mismo  rigor  de  fierro  que  hace 
falta para empezarlo se impone para terminar
lo. El cuento, en cambio, no tiene principio
ni fin: fragua o no fragua. Y si no fragua, la
 experiencia propia y la ajena enseñan que en
la mayoría de las veces es más saludable empezarlo de nuevo por otro camino, o tirarlo a
la basura. Alguien que no recuerdo lo dijo
bien con una frase de consolación: «Un buen
escritor  se  aprecia  mejor  por  lo  que  rompe 
que  por  lo  que  publica».  Es  cierto  que  no 
rompí los borradores y las notas, pero hice algo peor: los eché al olvido..."

 

Busca este ejemplar en tu libreria favorita y disfruta de los 12 CUENTOS PEREGRINOS de Gabriel García Marquez y deja que el mismo te cuente el porque son "12", porque "cuentos" y porque "peregrinos".

Julio Ramón Ribeyro Zúñiga (Lima, 31 de agosto de 1929 - 4 de diciembre de 1994) fue un escritor peruano, considerado uno de los mejores cuentistas de la literatura latinoamericana. 


Es una figura destacada de la Generación del 50. Su obra ha sido traducida al inglés, francés, alemán, italiano, holandés y polaco. Aunque el mayor volumen de su obra lo constituye su cuentística, también destacó en otros géneros: novela, ensayo, teatro, diario y aforismo. 


Hoy 04 de diciembre del 2020 se cumplen 26 años de su partida, Julio Ramón Ribeyro, quien con sus cuentos logra entrar a tu mente y a tu corazón, que te permite compartir con el toda la emoción, el misterio, la comedia, la frustración, la tristeza, la locura, etc. de su personajes, es fácil enamorarte de sus obras, de sus cuentos.


Un escritor humilde, con un muy buen humor, que vivía pegado a su maquina de escribir y a su cigarro, un profesional que amaba lo que hacia.


Cuenta que una vez fue invitado a un colegio donde niños que habían leído sus cuentos lo estaba esperando para homenajearlo, el llego y se dio cuenta que no era un escritor solitario, que tenia lectores y de todas las edades. Estos niños le dieron un regalo peculiar, una bolsa que contenía muchos lapiceros y cinco cintas para maquina de escribir, se la entregaron adjuntando una petición: “que nunca deje de escribir”.


Antes de su partida en el año 1994 ganó el reconocido Premio de Literatura Latinoamericana y del Caribe Juan Rulfo.


Ribeyro esta en los corazones y bibliotecas de todo el mundo que busco el privilegio de leerlo.


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20 Frases de Julio Ramon Ribeyro 

 

MIRA EL REPORTAJE QUE LE HIZO PANORAMA:



 

 

Julio Ramón Ribeyro, autor de historias como "Los gallinazos sin plumas" y "Las botellas y los hombres", falleció un 4 de diciembre de 1994 luego de una prolongada lucha contra el cáncer. Lea aquí veinte de sus frases más populares:


1. "Una persona sin amigos corre el riesgo de no llegar jamás a conocerse".

2. "En cada lector futuro, el escritor renace".

3. "Ser el eterno forastero, el eterno aprendiz, el eterno postulante: he allí una forma para ser feliz".

4. "Un amigo es alguien que conoce la canción de tu corazón y puede cantarla cuando a ti ya se te ha olvidado la letra".

5. "En la salud lo que me conduciría a la muerte y en la enfermedad lo que me mantiene vivo".

6. "¿Por qué escribo? Para crear, sin otro recurso que las palabras, algo que sea bello y duradero".

7. "El gran error de la naturaleza humana es adaptarse. La verdadera felicidad está construida por un perpetuo estado de iniciación, de entusiasmo constante".

8. "Es curioso. En el fondo de los ojos de las personas extremadamente bellas hay siempre un remanente de imbecibilidad".

9. "No concibo mi vida más que como un encadenamiento de muertes sucesivas. Arrastro tras de mí los cadáveres de todas mis ilustraciones, de todas mis vocaciones perdidas".

10. "Es necesario dotar a todo niño de una casa. Un lugar que, aún perdido, pueda más tarde servirle de refugio y recorrer con la imaginación buscando su alcoba, sus juegos, sus fantasmas".

11. "La vida no podía ser esa cosa que se nos imponía y que uno asumía como un arriendo, sin protestar. Pero ¿qué podía ser?… Debía haber una contraseña, algo que permitiera quebrar la barrera de la rutina y la indolencia y acceder al fin al conocimiento, a la verdadera realidad".

12. "Nada me impresiona más que los hombres que lloran. Nuestra cobardía nos ha hecho considerar el llanto como cosa de mujercitas. Cuando solo lloran los valientes: por ejemplo, los héroes de Homero".

13. "Quién sabe, sin embargo, si esto será lo mejor. Por lo menos cada uno sería feliz lo creo al menos y ésta es ya una razón suficiente".

14. "Pienso a menudo que así como la literatura de algún autor es la hechura de su propia vida, así también la vida de un autor es lo que uno escribe".

15. "Se sueña solo en primera persona y en presente indicativo. A pesar de ello el soñador rara vez se ve en sus sueños. Es que no se puede ser mirada y al mismo tiempo objeto de mirada".

16. "Cada escritor tiene la cara de su obra".

17. "Lo que seremos está allí, en su configuración y sus objetos. Nada en el mundo abierto y andarín podrá reemplazar al espacio cerrado de nuestra infancia, donde algo ocurrió que nos hizo diferentes y que aún perdura y que podemos rescatar cuando recordamos aquel lugar de nuestra casa".

18. "Empieza a sobrarme un poco de pasado. Ya no sé dónde meterlo ni qué hacer con él. Eso quiere decir que me estoy volviendo viejo".

19. "Falta de tradición, poca capacidad introspectiva, conciencia inmadura de la propia persona, menosprecio de un tipo de obra cuya repercusión es generalmente póstuma y, en último término, ¿por qué no? Concepción machista de la literatura, que hace considerar la redacción de un diario como cosa de señoritas".

20. "Entrar en una discusión es admitir por anticipado que tu contrincante puede tener la razón". 


 



Pienso en cómo sería mi vida, si fuera un portero profesional como mi ídolo Óscar Ibáñez. ¿Qué se sentirá que todo el país te vea y conozca y su mitad, más uno, te aliente? 

Sueño despierto mientras defiendo intrépidamente mi pequeña portería en la canchita de mi barrio, donde ya llevo tres buenas atajadas y donde me acaban de meter un gol por andar de soñador.

Hay días especiales en la vida, el de los cumpleaños, navidad, semana santa, etc. en realidad muy pocos en los cuales la mayoría de personas expresan su amor o empatia.

Ahora nada de eso existe de manera publica, por así decirlo, estamos en tiempos donde si cumplimos años lo celebraremos solo con las personas que viven en casa con nosotros, el coronavirus a hecho que nos aislemos socialmente aun de nuestros hermanos en Cristo, y  el gobierno nos tiene por nuestra protección encerrados.

Si tenemos tan pocas fechas o motivos para expresar amor y empatia, con la cuarentena y el virus las posibilidades de expresarlo se reducen en gran manera.

Pero la expresión del amor del cual se habla en la Biblia es un amor especial, muy diferente al significado que le da el mundo, ES MAS QUE UN SIMPLE AFECTO, es el verdadero AMOR, el cual tiene como contexto COMPASIÓN Y GRACIA, y en su mensaje SALVACIÓN, y es 100% aplicable a cualquier área de tu vida y en cualquier momento.

El virus ademas de traer muerte a traído preocupación, temor y escasez, pero también a traído la oportunidad de expresar ese amor del cual habla la Biblia que todos los creyentes por naturaleza deben tener, EL AMOR QUE NO QUIERE ENTREGAR SOLO EL EVANGELIO, SINO TAMBIÉN LA PROPIA VIDA. (1 Ts. 2:8)

MANOS A LA OBRA

Es momento de ver por los demás, si tienes algo de alimentos o productos de primera necesidad, aun si tienes algo de dinero, puedas darlo a tu vecino o a un familiar que lo este necesitando. El Evangelio nos tuvo que haber hecho así, naturalmente compasivos como Cristo, no la compasión que muere en un "que lastima", sino la que le da solución a la angustia o al sufrimiento ajeno.

Así como Pablo en 1 de Tesalonicenses 2:8 no le pongas limite a tu servicio como hijo de Dios, no dejes que el virus te quite la bendición de ser de bendición.

Tenemos la oportunidad de demostrar de que estamos hechos y de glorificar a Dios con nuestras acciones hoy!!!... manos a la obra!!!

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